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[av_heading heading=’Las Empresas Familiares ante el reto de la tecnología en sus procesos’ tag=’h3′ style=’blockquote modern-quote’ size=” subheading_active=’subheading_below’ subheading_size=’15’ padding=’30’ color=” custom_font=”][/av_heading]

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Para hablar de la historia de las empresas familiares, es necesario que nos remontemos muchísimos años en el tiempo. Al dominar el cultivo de la tierra y la ganadería, fue necesario  que los primeros que fuimos nosotros se agruparan en tribus para dar paso a la producción y posteriormente los primeros intercambios comerciales a manera de trueques.

La Empresa Familiar ha evolucionado desde entonces hasta nuestros días a través de diferentes períodos. En los últimos años, hemos sido testigos de un cambio tan emocionante como vertiginoso, en donde la tecnología, el internet y los nuevos modelos de negocio han marcado nuevos paradigmas que debemos de ser capaces de observar a su propio ritmo.

Hoy tenemos ejemplos muy claros de nuevas maneras de hacer negocios, en donde la tecnología y el mercado se alían en formas poco convencionales. Vamos a hablar de tres ejemplos muy claridosos y que nos ayudarán a entender como son las nuevas dinámicas comerciales.

UBER, AIRBNB y PAYPAL son tres empresas de tecnología que han cambiado esquemas poniendo en jaque a grandes sectores industriales como el transporte, la hotelería y los servicios a pesar de no tener ni vehículos, ni cuarto de hotel ni bancos. Esto nos abre una visión espectacular y totalmente nueva de la manera en que los negocios pueden hacerse.

Vemos también que las cosas empiezan a ser dotadas por la posibilidad de decidir y transformarse de manera autónoma. El internet de las cosas, aquel que da vida artificial a tu televisión, a tu refrigerador y al automóvil para que te guíe sin chofer y se estacione mejor, mucho mejor, que yo. Hace mucho que no nos aprendemos un número de teléfono porque podemos pedirle a Siri, nuestra asistente portátil que haga esa labor y las complicadas guías Roji pasaron a la obsolescencia total ya que Wase nos guía a nuestro destino con una sensual voz de acento españolado o cualquier otra que escojamos de entre su repertorio.

Todo esto está pasando en el mundo y mientras tanto las empresas familiares enfrentan el reto de alcanzar ese mismo ritmo y esa velocidad de crecimiento y de evolución. Necesitamos competir con nuevas herramientas, con una mayor creatividad y con procesos que puedan estandarizarse y repetirse a la velocidad de infinitum (suponiendo que el infinitum jale bien algún día).

Desde mi punto de vista, el reto de las Empresas Familiares ante estos nuevos escenarios se centra en el correcto establecimiento de controles internos, la clarificación de reglas entre el sistema familia y empresa, la estandarización en la toma de decisiones y el cumplimiento legal de sus obligaciones.

 

Controles internos. Partimos del hecho irrefutable de que la empresa debe ser un vehículo de generación de riqueza, una vez hechas las sumas, las restas y cualquier otra consideración contextual. Si no existe en la administración un sistema bien definido quedamos a expensas de fraudes, pérdidas patrimoniales y fracasos financieros, pero además, sin ellos, difícilmente podremos replicar un esquema de toma de decisiones acertadas y asertivas.

 

Clarificación de reglas entre el sistema familia y empresa. Se deben equilibrar los intereses divergentes de los accionistas. Sabemos que cada Accionista puede tener opiniones o criterios diferentes a la hora de tomar decisiones que involucren a la empresa y esto puede generar fricciones en el seno de la empresa y la familia, por eso la Empresa Familiar debe asegurar a los accionistas que sus intereses estarán debidamente protegidos.

La estandarización en la toma de decisiones. Esto nos permite establecer lineamientos, no solo en cuanto a la operación o administración misma de la empresa, sino también a establecer reglas de relación familia y empresa, previendo así potenciales problemas.

 

El cumplimiento legal de sus obligaciones. El Gobierno también actúa en su propio sistema, mismo que se relaciona a su vez con otros sistemas de otros Gobiernos. El Gobierno Mexicano es parte de un sistema económico y político mundial, estructurado a base de un sin fin de Tratados Internacionales. Esta presión obliga a una observancia cada vez más estricta del cumplimiento del Marco Juridico corporativo.

Solo las empresas que den estructura sólida en estos cuatro pilares a su empresa podrán competir en el mundo que viene, de decisiones tecnificadas y autónomas, de controles automatizados y con un gran enfoque a las ideas, la creatividad y la construcción de un mercado distinto.

Fernando Todd
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